En un mundo donde prácticamente todo está conectado a internet, desde nuestras conversaciones hasta nuestras compras, proteger nuestros datos personales es más importante que nunca. Aunque el tema de la ciberseguridad puede parecer complicado o reservado para expertos, la realidad es que con algunos cambios simples podemos mantenernos mucho más seguros.
Aquí quiero compartir contigo algunas recomendaciones fáciles para proteger tu información y navegar con mayor tranquilidad.
Una buena contraseña
Las contraseñas son la primera barrera que protege nuestras cuentas aunque muchas veces usamos combinaciones que son fáciles de adivinar, como «123456» o «contraseña», lo ideal es crear contraseñas largas y únicas, una buena práctica es usar combinaciones que incluyan letras mayúsculas, minúsculas, números y símbolos además de que estas sean de 12 caracteres. También es recomendable evitar repetir o reutilizar la misma contraseña en diferentes sitios para evitar que si una cuenta es vulnerada, las demás sigan siendo seguras.
Si estás pensando que es demasiado difícil recordar tantas contraseñas, siempre puedes utilizar gestores de contraseñas como LastPass, que almacenan tus claves de forma segura y además te ayuda a generar combinaciones robustas.
Autenticación de dos factores
Además de la importancia de una contraseña fuerte, muchas plataformas nos ofrecen la autenticación de dos factores (o 2FA, por sus siglas en inglés). Esto consiste básicamente en que, además de ingresar tu contraseña, necesitarás utilizar un segundo código que solo tendrás tú, normalmente en tu teléfono o en una aplicación de seguridad como puede ser Google Authenticator o Microsoft Authenticator entre otras.
Activar esta opción es un paso muy sencillo que puede marcar una gran diferencia en la protección de tus cuentas ya que si alguien intenta entrar, aunque tenga tu contraseña, no podrá hacerlo sin ese segundo código.
Mantener los dispositivos y programas actualizados
A todos nos ha pasado, estás viendo algo en el ordenador o en el móvil y nos salta una notificación de una actualización pendiente, siempre nos viene mal dejar lo que estamos haciendo y realizar la actualización, nunca es un buen momento para hacerlo, lo pospones para luego. Debemos ser conscientes que estas actualizaciones son más importantes de lo que parecen porque evitan huecos de seguridad que los ciberdelincuentes podrían aprovechar.
Tener al día el sistema operativo de tu móvil y ordenador, así como las aplicaciones y el antivirus, es un hábito sencillo que puede evitarte muchos problemas a largo plazo.
No abras todos los mails que recibas
Uno de los métodos más comunes para intentar engañar a los usuarios es mediante el phishing, que consiste en enviar correos electrónicos que parecen legítimos, pero cuyo objetivo es robar información personal. Si recibes un correo inesperado, especialmente si te pide información confidencial o que hagas clic en un enlace, tómate un momento para revisarlo bien, mira quién lo envía y si hay algo que no cuadra, como pueden ser direcciones de correo extrañas o errores de redacción. Siempre es aconsejable prevenir y contrastar información.
Redes sociales, cuidado con lo que compartes
No podemos pasar por alto el tema de las redes sociales ya que son parte de nuestro día a día , a parte de consultarlas también compartimos información propia por lo que hemos de tener especial cuidado con lo que llegamos a publicar, especialmente con datos referentes a nuestra dirección, teléfono o incluso nuestra rutina diaria ya que pueden ser utilizados de forma no deseada por los ciberdelincuentes. Es importante configurar la privacidad de las cuentas para que solo las personas cercanas puedan ver nuestras publicaciones además de evitar conectarnos a otras aplicaciones usando nuestro perfil de redes sociales, ya que esto puede generar vínculos innecesarios entre nuestras cuentas.
No uses Wi-Fi públicas
Conectarte a redes Wi-Fi públicas puede ser muy cómodo pero también es un gran riesgo porque otras personas podrían interceptar tu información. Una forma de protegerte si deseas continuar utilizando Wi-Fi públicas es usar una VPN, ya que de esta manera conseguimos cifrar los datos que circulan por la misma haciéndolos por tanto más difíciles de obtener.
Ten respaldos de tus datos
Por último, pero no menos importante, están las copias de seguridad también conocidas como backups.
Perder tu información, ya sea por un error técnico o un ataque, puede ser muy frustrante además que nos puede ocasionar un alto coste económico u emocional; tener un respaldo de tus documentos, fotos y otros archivos importantes te asegura que, pase lo que pase, tendrás acceso a ellos.
Puedes hacer estas copias en la nube, usando servicios como Google Drive, OneDrive, Dropbox u otros, o incluso puedes hacerlo en un disco duro externo, esto ya va en gustos o preferencias, la importancia reside en hacerlo de forma regular.
Cuidar tu información no tiene que ser complicado ni intimidante, con pequeños ajustes en tus hábitos digitales puedes protegerte de muchas amenazas y navegar con mucha más confianza. La ciberseguridad es algo que todos podemos implementar, sin importar nuestro nivel de experiencia.
Si tienes alguna duda o consejo adicional que quieras compartir, no dudes en hacerlo. ¡Entre todos podemos aprender a mantenernos más seguros en línea!
¿Te gustaría compartir algún consejo o truco para que nos podamos proteger mejor? ¡Déjalo en los comentarios y aprendamos juntos!